Sweno, Alcampo Móvil, Kuile... ¿llegarán a nacer estas OMVs?
Una treintena de marcas se disputa actualmente el mercado de la telefonía móvil en España. No obstante, el reparto de este sector, que cuenta con unos 52 millones de líneas activas y una penetración que supera el 110%, está bastante desproporcionado.
Yoigo y las OMV, que algunas tienen menos de dos años de vida se reparten en torno al 4% del pastel mientras que el resto corresponde a tres grandes multinacionales de las telecomunicaciones.
¿Merece la pena luchar por un trozo de mercado, aunque sea pequeño, en el que para captar clientes hay que robárselos a una competencia tan fuerte? La batalla se ha vuelto más cruenta en las últimas semanas desde que las grandes han comenzado a apostar por una estrategia low cost que desarma el principal argumento de las nuevas operadoras: "Somos más baratas".
A la complejidad propia del mercado de la telefonía móvil se une un entorno económico marcado por una cruenta crisis mundial. ¿Merece la pena lanzar una OMV en estas circunstancias?
"Una empresa tecnológica con un modelo de negocio que cubra alguna de las necesidades esenciales y básicas de un determinado target puede tener éxito", comenta Hernán Rodríguez, director de la Asociación Española de Comunicaciones Móviles, aunque matiza: "No cabe duda de que existe actualmente un nivel de riesgo muy elevado y que los inversores prefieren mantener posiciones conservadoras antes que invertir en nuevos proyectos, por lo que no creo que veamos nuevos lanzamientos durante este año".
Por su parte, otro experto, Miguel ángel Uriondo, redactor de tecnología y telecomunicaciones de Actualidad Económica, opina que "con cash a tu disposición, no creo en los malos momentos, sólo en los malos proyectos. Los que no están funcionando son exactamente los que todos mirábamos con suspicacia y con los ojos entornados, como Ono io".
Oportunidad de negocio
En cualquier caso este entorno negativo puede convertirse en una oportunidad, tal y como explica Uriondo: "El momento actual puede provocar un cambio real en el modelo de consumo de telefonía móvil de los españoles, y quienes aguanten se beneficiarán de él. Lo demuestra el hecho de que las operadoras estén quitando peso a la subvención de terminales por primera vez".
Pero la misión no resulta sencilla. Por un lado ya existen muchas opciones similares y, por otro, "las operadoras tradicionales no se han dormido. Movistar Simple, la oferta de Telefónica de 9 céntimos por minuto, es una prueba evidente", ejemplifica el redactor de Actualidad Económica.
Precisamente una cuestión tan sensible como el bolsillo de los consumidores es el principal argumento para que Kuile nazca en estos momentos. Raúl Mate, apoderado de esta compañía, explica: "En nuestro caso, consideramos que la crisis supone un buen momento para que los clientes se informen y asesoren para pagar lo menos posible y así optimizar sus recursos económicos".
¿Abortar el proyecto o esperar?
No obstante algunas empresas lo tienen claro: es mejor tirar la toalla y abandonar los planes de lanzar una OMV. Es el caso de Sarenet, del grupo Vocento.
Su director, José María Fernández, argumentaba hace unas semanas: "Nos dimos cuenta de que contábamos con una masa crítica limitada de 4.500 clientes".
¿Qué ocurre con otros proyectos que tienen pendiente su lanzamiento comercial desde hace tiempo como Sweno (El Corte Inglés), Alcampo Móvil, Kuile, Blyk, fonYou.com y Flipamóvil?
Vía | Movilonia
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